El óxido de manganeso o dióxido de manganeso (fórmula química MnO2), es un óxido covalente del manganeso. Se utiliza para pintar cristales y cerámica, y para la fabricación de pigmentos marrón y negros.
Al igual que otros óxidos puros, puede provocar burbujas en los esmaltes debido a las impurezas que contiene, por eso se suele calcinar en el caso de que esto suceda.